.jpg)
Aparte de este seguimiento
continuo también recurriremos a un tipo de evaluación puntual, cada poco
tiempo, después de cada una o varias temáticas, que consistirá en una prueba en
la que se recogen los puntos esenciales trabajados hasta ese momento. Las
preguntas de esta prueba han de desarrollar las mismas estrategias que las
practicadas en el aula.
Evaluar implica aplicar
criterios para juzgar si los resultados académicos se acercan a los objetivos
propuestos. Con la evaluación se pretende introducir una relación entre
profesor y alumnos que obliga a la reflexión frecuente sobre si los métodos que
estamos utilizando son los correctos para ese momento o para ese grupo.
La
diversidad de contenidos que se van a enseñar en esta unidad didáctica va a requerir,
como en el caso de los métodos, instrumentos de evaluación variados. De ellos
podemos utilizar:
a. La observación del trabajo diario de los alumnos,
anotando sus intervenciones y la calidad de las mismas, valorando su
participación en los trabajos de equipo, y controlando la realización de los
procedimientos nos mostrará el progreso y el ritmo del alumno en el
aprendizaje.
b. Las pruebas orales y escritas, tanto libres como
objetivas, que suelen aplicarse a la evaluación de los contenidos conceptuales.
Pueden ser: ejercicios de gramática, ejercicios de comprensión oral, de
comprensión escrita, descripciones, mini -diálogos...
c. El análisis de los trabajos escritos o expuestos puede
proporcionar un recurso para valorar su capacidad de organizar la información,
de usar la terminología con precisión y su dominio de las técnicas de
comunicación.
No hay comentarios:
Publicar un comentario